jueves, 12 de febrero de 2015

 Cuando volvemos las fugaces horas
        del pasado a evocar,
temblando brilla en sus pestañas negras
una lágrima pronta a resbalar.
  Y, al fin, resbala y cae como gota
        de rocío al pensar
que cual hoy por ayer, por hoy mañana,
volveremos los dos a suspirar.

autógrafo
Gustavo Adolfo Bécquer

No hay comentarios:

Publicar un comentario