CAMBIOS
Un día me volveré niebla.
Cuando llegue la noche seré la minúscula partícula de furia de una ola,
furia mojada.
Seré brisa y cada gota de la sal que llore el viento.
Un día me volveré el tapiz preferido de la espera.
cuando llegue la noche seré hastío, huella, camino de vuelta a ninguna parte.
No soy arena pero ondulo en duna.
No dormiré más al fondo de la caracola.
No soy secreto.
Seré una nube para lloverme.
Borraré a zarpazos el horizonte,
no habrá distancia,
Seré gaviota para volar versos hasta la tarde
y cuando es sol se ponga,
al primer susurro de tus labios,
buscaré un faro que me guíe hasta tu playa
para cumplir mi promesa de esperarte hasta el primer beso.
Teresa Delgado © 2014
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